El frío no causa enfermedades reumáticas. Sin embargo, los cambios de presión atmosférica y temperaturas contraen los músculos para mantener el calor y eso genera dolor articular.
La inflamación de los vasos sanguíneos es conocida comúnmente como vasculitis. Como consecuencia de esa inflamación, disminuye el flujo vascular u ocurre una interrupción de este.
La artritis reumatoide es un trastorno autoinmune e inflamatorio que afecta a las articulaciones y tejidos del cuerpo, y que también puede dañar la piel, los ojos y algunos órganos del cuerpo como los pulmones, el corazón y los riñones.