Durante esta temporada las personas podemos aumentar de 2 a 4 kilos debido a los excesos en la alimentación. El peso ganado –por el alto consumo de fuentes de carbohidratos y grasas – no es un su totalidad grasa, pues al aumentar los depósitos de glucógeno también aumenta los de agua corporal. Así, esos kilos de más serían la suma de grasa y agua.
Además, debemos saber que mientras más carbohidratos consumimos, los niveles de glucosa también se elevan, lo que estimula la insulina y fomenta la síntesis de grasa. Esto ocasiona que los depósitos corporales de grasa incrementen, reflejándose en un aumento de peso.
Otro punto a tomar en cuenta son los brindis por fiestas. Y es que por cada gramo de alcohol obtenemos 7 calorías, casi el doble de lo que aporta 1g de carbohidrato. En este caso, recomendamos que una buena manera de controlar su consumo es dosificar las cantidades, o mezclar o intercalar con otras bebidas sin alcohol o agua.
Para minimizar el impacto de las cenas de Navidad y Año Nuevo, algunos consejos que podemos adoptar durante las reuniones son:
Para contribuir a eliminar los kilos ganados durante las fiestas de fin de año, es recomendable iniciar una rutina de actividad física de unos 60 minutos diarios, con ejercicios cardiovasculares, que puede ser caminatas rápidas, natación, trotes, ciclismo, etc. Éstas permitirán incrementar el gasto calórico diario haciendo más efectiva la pérdida de peso.